domingo, 6 de septiembre de 2009

La risa es la mejor medicina para el alma

menahem belilty
Menahen Belilty
El despertar, estírese bien. Antes de pararse de la cama, respire, abra los brazos todo lo que pueda y comience a reírse… ¡Jajaja!; ¡Jejeje!; ¡Jijiji!; ¡Jojojo!;!Jujuju! Hágalo por 15 minutos. ¿Cómo se siente? Mejor ¿Verdad? No es ninguna locura. La indicación es de Menahen Belilty, connotado risólogo y certificado como líder de la risa. Sí, como lo leyó: usted también puede prepararse para ser líder de la risa y obtener su credencial ¿Que cómo es eso? Que puede aprender a reír y enseñar a otros, lo que es muy saludable y ofrece mejor calidad de vida.

“Quizás 15 minutos para una persona que no tiene práctica es muchísimo tiempo, pero hágalo por 30 segundos, cuando mucho podrá llegar a 1 minuto, pero en la medida que vaya practicando, se le hará más fácil. Empieza el día con una sonrisa, te irá bien todo el día. Así que comensamos por cambiar nuestra actitud .Si te conectas con la rabia, con lo que tienes pendiente, con la agresividad, es tu decisión. Pero más bien, podrías dar gracias por comenzar un nuevo día; por lo que tienes. A mí me encanta dar gracias a Dios porque estoy vivo”.

Menahen Belilty, director de la agrupación jocosa musical Takititá, decidió ser feliz y contagiárselo a otros. “Un día me di cuenta que era extremadamente serio, casi nunca reía. Yo nací en Casa Blanca, Marruecos, en Africa y a los dos años me llevaron a vivir a Israel cuando estaba en plena guerra con el Líbano. Estábamos justo en la zona fronteriza y teníamos que correr al refugio cada vez que escuchaba una sirena, para resguardarnos del bombardeo. Quizás mi tristeza venía de esa época”.

Ya cuando llegó a Venezuela a los 7 años era serio y muy tranquilo. Fue en bachillerato cuando se encontró con la risa. “Me di cuenta que cuando decía cosas que para mí eran muy serias, la gente se moría de la risa. Resulta que tenía una óptica de la realidad que era muy divertida, un humor un poco negro, es verdad. Entonces, en quinto año, teníamos un grupo llamado los ‘Gramineas boys and one girl’; gramínea era una forma elegante de decir ‘paja’ que era nuestra única habilidad, pero sonaba muy bien ese nombre en inglés. Hicimos una obra de teatro, en la cual nos burlábamos de los profesores, los alumnos de nosotros mismos que duraba hora y media. No se me olvida la imagen de un profesor de historia tirado en el piso doblado de la risa por lo que estaba oyendo. Ese fue mi primer encuentro formal con la risa”.

Aclara que sigue siendo serio, pero siempre está de muy buen humor y se ríe como quien hace ejercicios diariamente.

- Si te ríes duplicas tu capacidad respiratoria, todo tu cuerpo se relaja y se oxigena. Además pasan muchas cosas: cuando te ríes olvidas los problemas, y la mente queda en blanco. ¿Por qué? -se pregunta. Es imposible reírse y pensar al mismo tiempo. Si éstas pensando no te puedes reír. Es un ejercicio en el cual está involucrado cuerpo y mente.

- En 1983, cuando volví a escribir humor para un grupo que se llamaba Alpargata Cantorum, ahí se puede decir que comienza formalmente mi carrera como humorista.

Su primer libro “La risoterapia, curarse con risa” ya va por la segunda edición, y acaba de terminar otro que todavía no ha llevado a la imprenta porque está en etapa de corrección llamado “Ser feliz hoy”. “No hay que esperar a mañana para sentirse bien, es una decisión. Tú eliges cada día sentirte bien o mal, sonreír o tener cara de cañón”.

Cada risa con su vocal

“Cada vocal relaja una parte del cuerpo diferente. Yo recomiendo que al despertar, te rías con todas las vocales: la “a”, la “e”, la “i”, la “o”, la “u”. Por ejemplo, cuando nos reímos con la “a” ¡ja, ja ja!, desde el plexo solar hasta el cuello se relaja y, sentirás cómo vibra esta parte del cuerpo.

“Reírse con la “e”, ¡Je, je, je!, es muy importante para los que usan la voz para trabajar. Locutores, profesores, cantantes, actores, cualquier persona que atienda público. Relaja toda la parte delantera de la garganta y si tienes dolor lo alivia. Facilita el trabajo y si tienes que decirle algo delicado a alguien, a tu pareja, a un hijo, al jefe, ríete con la “e”, y te desbloquearás y te será más fácil comunicarte. Por ejemplo, es muy bueno para las personas que tienen miedo escénico y les toca hablar frente a un público. Ríete antes de hablar con el jefe, no vaya a ser que no entienda que es una técnica para relajarte y considere que te estás burlando del él.

“Luego está la risa con la “i”. !Ji, ji,! -levanta la voz y pareciera que todo el mundo ha desviado su mirada hacia la mesa donde estamos realizando la entrevista-. Es realmente muy fea, continúa diciendo sin percatarse de la reacción de los demás, de hecho es la risa de las brujas en las comiquitas, pero en realidad te conecta con la intuición y te vuelve más creativo, porque estimula la oxigenación cerebral, la circulación de la sangre del cuello hacia la cabeza.

Toda la risa te une al niño feliz que fuiste alguna vez, por lo tanto con la creatividad y en general propicia la circulación. Es como si le dieras un masaje al corazón. Hay estudios que demuestran, que la mejor medicina preventiva es la risa. Olvidas los problemas, porque tu mente queda en blanco, te desconectas de lo que te preocupa y angustia, para conectarte con esa explosión de felicidad, por eso al reírte te sientes mucho mejor”.

“!Jo, jo, jo! Es la típica risa ¿de quién? De Santa Claus. Cuando se ríe, ¿qué se le mueve? La barriga. Efectivamente, vibra el aparato digestivo y una parte de los pulmones. Estimula el sistema endocrino que tiene que ver con la eliminación de toxinas, y mueve un músculo que está aquí -se señala- que es el diafragma, por lo tanto mejora tu digestión. No estoy diciendo que te rías durante las comidas, sino antes o después”.

“Muy poca gente se ríe ¡Ju, ju, ju! Y es importantísimo porque cuando te ríes con la “u” mueves las hormonas y los órganos sexuales. ¿No has escuchado esa expresión “ahí hay juju”, para referirse a esas personas que tienen algo como pareja, que sienten atracción”. Tiene mucho que ver con esta risa, porque estimula los órganos sexuales.

La risoterapia se utiliza a nivel mundial para pacientes con enfermedades terminales, como cáncer, sida, porque hasta la más amable sonrisa hace que segregues endorfinas, que son como unas drogas naturales que tiene el cuerpo y que producen tres efectos: como potente analgésico capaz de eliminarte cualquier dolor, genera euforia y bienestar como el que da el deporte y también dan señales a todo el cuerpo para protegerte de virus y enfermedades.

Una pequeña sonrisa hace que eleves tu sistema inmune. ¿Por qué no te da gripe en vacaciones? Porque andas contento y feliz.

Me pasó una vez en un taller que a la hora del primer break, luego de una hora y media de risoterapia, una señora con todo el cuerpo adolorido porque tenía artritis, me dijo que no lo podía creer, pero ya no le dolía nada, fue el efecto de las endorfinas por reírse”.

Sin chistes

- ¿Se puede reír en medio del duelo, de la tristeza o la depresión que produce un fracaso?

- La preocupación, la angustia, la tristeza, el mal humor hacen que bajen las endorfinas, se empeore la circulación y se originen problemas peores. Hay un estudio del endocrinólogo venezolano Lisandro López Herrera que dice que el 93% del cáncer, tiene un origen emocional demostrable. Es decir que lo que pasa por tu mente es muy importante para tu salud. Si está conectado con cosas negativas todo el tiempo, la potencialidad de que te enfermes es muy alta.

- ¿Del humor a la risa como terapia no hay un trecho?

- En 1998 comencé a hacer risoterapia que es distinto porque no utiliza el humor. No logras la risa a través de chistes. ¿Por qué llego a la risoterapia? Porque me daba cuenta que la gente cuando se reía, luego de una función salía transformada. Me pareció muy importante investigar cuáles eran los beneficios de la risa, porque el cuerpo vibra y las personas cambian. Resulta que cuando te ríes, no solamente se involucran los dos hemisferios, sino hay 400 músculos que se mueven. Cuando comencé a estudiar la risa me sentí como Colón descubriendo América, y de pronto me di cuenta al igual que Colón que no fue el primero en llegar a América, resulta que la risoterapia tenía más de 30 años como técnica para sanar personas. Hay una referencia de un señor que se llamaba Norman Kossis, un editor de una revista en los Estados Unidos, que le dio “espondilitis anquilosante” que es una enfermedad degenerativa terrible, ataca la médula espinal y estaba prácticamente paralizado en una cama de hospital, no se podía mover. Los dolores eran tan terribles que no lo dejaban dormir, y los doctores lo desahuciaron. Como se deprimió mucho, un médico amigo le recomendó algo de alegría, así que él pidió que le llevaran películas cómicas para reír, y descubre que cuando lo hacía por más de 10 minutos se le quitaban los dolores por dos horas. Así que siguió haciendo sesiones diarias de risas con películas cómicas, y lo que pasó fue que los otros pacientes se quejaron porque su risa era muy contagiosa y muchas personas que están enfermas les gustan regodearse con su padecimiento. Se mudó del hospital a un hotel para seguir riéndose, y lo interesante es que siguió las recomendaciones médicas pero realmente se curó con la risa. Todo esto se sabe porque él escribe el libro “Anatomía de una enfermedad” y dedicó luego su vida a investigar los beneficios de la risa y de las emociones positivas. Esto me motivó a sumarme a esta terapia de hacer que la gente se ría sin chistes, lo que fue muy difícil porque me era muy fácil trabajar con humor y el chiste porque se basa en la burla de algo o alguien y no a todos les gusta, por eso no es tan positivo. Por eso ahora hay un movimiento mundial en el cual disfrutamos y nos reímos todos utilizando distintas dinámicas, ejercicios donde no hay chistes ni dependes de tu intelecto. La risa funciona en todas partes del mundo porque es universal.

-¿ Cómo lo impactó conocer los alcances de la risa?

- Me planteé si debía de dejar de hacer humor porque podía hacerle daño a alguien, pero personas muy espirituales me orientaron para entender que la risa es tan maravillosa y produce tan buenos resultados que no importaba si la lograba a través del humor. Entonces decidí hacer las dos cosas.

Conjuntamente con estudiantes de psicología de la UCV que estaban haciendo su tesis de grado, aplicamos tratamientos de risoterapia a niños con cáncer para medir a través de la saliva, el valor inmune de la inmunoglobulina A, durante mes y medio. ¡Fue interesantísimo! Hubo un caso de un niño con cáncer que sus valores subieron de 5 a 100% por media hora de risa. Se descubrió que la risa tenía un efecto acumulativo y mientras más se reían más rápido subían los niveles. Por eso insisto que si la mejor medicina preventiva es la risa, no esperes estar enfermo para comenzar a reír. Comencé a dictar talleres para que cada día más personas se enteren. Fui el primero que se certificó y por eso me autodenomino el 001 de la risa en Venezuela. El doctor Lisandro López Herrera que es endocrinólogo, escribió un libro llamado “La Alquimia del Sufrimiento” donde habla de la importancia de conectarse con la risa desde un punto de vista estrictamente médico.

-¿Bioquímicamente, cómo impactan los pensamientos?

- Fíjate, si tú piensas mucho en algo, tienes una emoción repetida, tu cuerpo tiende a buscar esa emoción. ¿No conoces personas que siempre que las ves están deprimidas? Porque el cuerpo instintivamente tiende a repetir la emoción porque la necesita y es igual para lo negativo que para lo positivo. Reírse es totalmente físico, sin mente. En la India había templos enteros dedicados sólo a la risa, porque la condición principal de la meditación es tener la mente en blanco. Cuando te ríes de verdad estas conectado con la felicidad, no hay pose ni ego.-¿Cómo reírse si no hay ganas por una pérdida, un problema, un duelo?

- Todas esas emociones las tienes que vivir, porque si no, no tendrías equilibrio en la vida. Hay momentos que debes ocuparte de algún asunto, el error es decidir quedarse enganchado en el duelo para siempre, en la preocupación. Intelectualizando ni siquiera con el humor.

- ¿Uno no tiene que aprender a reírse?

- No, en lo absoluto. Todos sabemos reírnos pero se nos olvida

Tomado de entrevbista realizada por Dhamelis Díaz y publicada en el diario “El Carabobeño”.

Comienza con lo que tienes

comienza con lo que tienes

Tu ya tienes todo lo que necesitas para comenzar a crear tu futuro. Sin embargo a veces te encuentras diciendo: si tan solo tuviera esto…si al menos esto fuera distinto…si tuviera más dinero…

No exageres la importancia de las cosas que no tienes. Empieza con lo que tienes. No con lo que te hace falta .

No permitas que aquello que no puedes hacer, te impida hacer lo que sí puedes. La pasividad prolongada paraliza la iniciativa. Para la mente que vacila, todo parece imposible .

No esperes que existan circunstancias extraordinarias para hacer el bien, hazlo en las situaciones comunes. No necesitas más energías, habilidad, ni mayores oportunidades. Lo que debes hacer es sacarle provecho a lo que ya tienes.

El encanto de lo distante y lo difícil es engañoso . “La gran oportunidad se encuentra donde está” .

Lo que puedes hacer ahora es la única influencia que tienes sobre tu futuro. La grandeza verdadera consiste en demostrar excelencia en las pequeñas cosas .

La alegría nunca vendrá a quienes no saben apreciar lo que ya poseen. La mayoría de las personas cometen el error de buscar muy lejos aquello que está cerca .

Nadie logró el éxito mientras esperaba que todas las condiciones fueran ideales.

No pierdas el tiempo con dudas y temores acerca de lo que no tienes. Decídete de lleno a terminar la tarea que tienes entre manos, sabiendo que el correcto desenvolvimiento actual es la mejor preparación para tus años venideros.

Simplemente, hazlo con lo que tienes.

Vive alegre

Felicidad

La alegría es algo simple, pero no sencillo. Es simple apreciar si una persona es alegre o no, y la forma en la que ilumina a los demás, sin embargo tratar de ser una persona así no es sencillo. La alegría es un gozo del espíritu. Los seres humanos conocemos muy bien el sufrimiento y el dolor, y quienes han perdido a un ser querido lo han experimentado en toda su profundidad. Pues así como conoce el dolor y el sufrimiento, es capaz de tener las sensaciones opuestas: bienestar y ¿felicidad? Sí, felicidad. Sin embargo la alegría es distinta del dolor, pues el dolor generalmente tiene causas externas: un golpe, un acontecimiento trágico, una situación difícil. Y la alegría es exactamente al revés, proviene del interior. De nuestra alma, hay un bienestar, una paz que se reflejan en todo nuestro cuerpo: sonreímos, andamos por ahí tarareando o silbando una tonadita, nos volvemos solícitos… El cambio es realmente espectacular, tanto que suele contagiar a quienes están alrededor de una persona así. La alegría surge, en primer lugar, de una actitud, la de decidir cómo afronta nuestro espíritu las cosas que nos rodean. Quien se deja afectar por las cosas malas, elige sufrir. Quien decide hacer lo correcto y buenas acciones, entonces se acerca más a una alegría. Una alegría que viene desde adentro. La fuente más común, profunda y grande de la alegría es el amor, particularmente el amor en pareja. ¿Quién no se siente alegre cuando recién conoció a una persona que le gusta? Aún más, ¿quién no ve el mundo diferente cuando se da cuenta de que esa persona, además, está interesada en nosotros? El amor rejuvenece y es una fuente espontánea y profunda de alegría. Ese amor es, efectivamente, el principal combustible para estar alegres. Quien no ama, no ríe. Y es por eso que el egoísta sufre, y nunca está alegre. Ama a tu prójimo, como a ti mismo, sé menos crítico, más comprensivo y vive en el ahora y serás feliz. Nuestra solución.

Como salir adelante

como salir adelante

¿Cómo conservar la paz interior en el ajetreado mundo de hoy sin quedarse rezagado ni ser arrollado por la corriente?

1. Fíjate prioridades y metas.

Sin metas que valgan la pena nunca alcanzarás verdaderamente el éxito en la vida, por mucho dinero que ganes o mucha fama que adquieras.

El éxito nace en el corazón. Si nuestros móviles son puros y damos preferencia a las cosas que tienen más importancia, tenemos la mitad de la batalla ganada.

Analiza las cosas objetivamente. No dejes que los pequeños contratiempos se conviertan en un fastidio mayúsculo que te reste inspiración y fuerzas.

2. Toma tiempo para relajarte.

Siempre habrán presiones para cumplir tus metas de trabajo. Si dejas que estas presiones dominen tu vida, nunca encontrarás tiempo para relajarte y disfrutar la vida.

Tienes que tomar una pausa periódicamente y hacer conexión con ‘la fuente’ – Dios- para recargar tus baterías o terminarás sin energia.

Es mejor tomar tiempo para descansar regularmente que arriesgar una crisis nerviosa. No importa cuan importante sea tu trabajo, no es más importante que tu salud y bienestar espiritual.

3. No caigas en la trampa del materialismo.

Las cosas materiales satisfacen el cuerpo temporalmente pero solo Dios y Su amor pueden verdaderamente satisfacer el espíritu humano.

La verdadera riqueza se mide en las cosas que el dinero no puede comprar.

Muchas personas poseen cosas y muchas personas son poseídas por sus cosas.

El éxito material durará hasta tu muerte; ¡Pero el amor durará por la eternidad!

4. Dedica tiempo a los demás.

Si das preferencia a las personas, la vida te regalará lo mejor.

Empezar el día con amor hace más llevadera la jornada.

Toma en cuenta la personalidad y las preferencias, necesidades y limitaciones de quienes trabajan contigo.

Eso contribuye mucho a reducir el estrés y las fricciones, que son dos archienemigos de la felicidad.

Ármate de amor y cambiarás el mundo, porque el amor transforma todo lo que toca.

5. Ten una actitud positiva y alegre.

Para sacarle el máximo provecho a cada día, búscale el lado bueno a toda situación.

Una actitud victoriosa es el primer paso hacia el éxito. Habitúate a mirar más allá de los obstáculos, las desilusiones, las contrariedades e incluso los fracasos.

La sonrisa es el alumbrado del rostro y la calefacción del corazón

La risa nos relaja físicamente y nos renueva mental y emocionalmente. Nos ayuda a ver los problemas con mayor objetividad.

6. Lleva una vida saludable y equilibrada.

Más vale prevenir que curar. Más vale evitar que remediar.

Tómate tiempo para gozar de la vida.

Si tu vida es un continuo dolor de cabeza, tal vez se deba a que te estás llenando la cabe

Lo que consumimos mental y espiritualmente es tan importante para nuestro bienestar como lo que comemos.

Claridad hacia afuera, oscuridad hacia adentro

ClaridadEn días pasado hablaba con una muy querida amiga, y le hablaba acerca de mis planes a corto plazo. Y ella me hizo la observación, que no me sentía muy entusiasmado por lo que le estaba contando.

Le dije que en esos momentos, no me sentía muy alegre que se dijera.

A lo que me respondió diciendo que cómo era posible que yo, que siempre buscaba la alegria de las demás personas, y que siempre me encontraba contagiando felicidad a los que me rodean, no estuviese alegre.

Lo primero que pensé fue “Claridad hacia afuera, oscuridad hacia adentro”. Pero después recordé muchas de las cosas que he publicado en este blog. No siempre podemos estar felices. Claro, de nosotros depende el vivir momentos felices la mayor cantidad de tiempo posible, pero no siempre se puede.

Y muchas veces, uno puede actuar como agente catalizador. Así no estemos felices, tengamos siempre una sonrisa en la cara, e irradiemos felicidad.

Seguramente, algo de esa alegría y felicidad que estamos compartiendo, nos llegará de vuelta.

Lo segundo que pensé fue en lo contrario. En las personas que llamamos “Nubes Grises”. Pero eso lo dejo para la próxima semana…

Sonriamos. Seamos felices. Repartan “buena vibra”. Haran del mundo un lugar mejor para vivir…

jueves, 16 de julio de 2009

CARTA A LOS JOVENES

¿Por qué no soy feliz?

por que no soy feliz

Mi primera respuesta a tu pregunta es otra pregunta:
¿Qué crees tú que necesitas para ser feliz?
¿Qué cosas quisieras tener para experimentar felicidad?, o
¿Que personas necesitas tener a tu lado para sentirte feliz?, o
¿Qué circunstancias necesitas que cambien para que seas feliz?

Hay personas que nunca se sienten realizadas. Muchas cosas le fastidian y le molestan. Ellos van por este hermoso mundo corriendo desesperados como un niño que afanado persigue el arco iris.

A pesar del serio esfuerzo del niño y su intento de acercarse, el arco iris parece burlonamente alejarse. Para esas personas, la felicidad siempre se haya más allá de donde ellos se encuentran.

Un joven decía: “Me casaré cuando encuentre la persona que traiga satisfacción a mi vida”. Con esa filosofía de vida algunos piensan: cuando encuentre a mi cónyuge, entonces seré feliz.

Otros que ya lo han encontrado y ya se han decepcionado, piensan: “cuando me separe, entonces seré feliz”. Algunos piensan: “cuando tenga hijos seré feliz y otros, cuando se marchen, entonces comenzará mi felicidad”.

La vida no funciona así. Podrás tener riquezas y ser infeliz, estar rodeado de las personas más amorosas y vivir las circunstancias ideales, …pero eso no quitará de ti todos tus males.

Es que la felicidad no se descubre al encontrar a la persona apropiada, …sino en ser la persona adecuada. La felicidad no está en encontrar a quien te haga feliz, …sino en aprender a traer felicidad a los que te rodean.

La felicidad la encuentra la persona que aprende a vivir sabiamente. Establece relaciones saludables, pone límites, acepta lo bueno y rechaza lo cuestionable.

Es feliz quien se acerca a las personas sin sospecha pero con prudencia y se aleja de quienes le hacen daño, sin maltratar pero con inteligencia. La felicidad la encuentra quien aprende a usar las cosas y no a las personas, quien no abusa ni permite el abuso.

No es feliz quien nunca recibe heridas sino quien sabe cómo evitarlas y, cuándo es imposible, sabe cómo curarlas.

No es feliz quien nunca tiene problemas o todo lo tiene resuelto, …sino quien cuando estos llegan los enfrenta sabiamente y cuando no puede, busca ayuda inmediatamente.

Por nuestro propio bien, dejemos de buscar la felicidad en las cosas, personas o circunstancias que nos rodean y comencemos a cambiar desde nuestro interior, las actitudes que nos están afectando.

Un oso en la cueva

osomarron

Una antigua historia habla de dos adolescentes que exploraban una cueva cuando vieron lo que parecían ser las enormes y profundas huellas de un oso dentro de un cavernoso túnel. Decidieron seguir avanzando dentro de la oscura caverna, pero caminaban despacio y con mucha cautela. Hacían brillar la luz de sus linternas en cada rincón, y mantuvieron los ojos y los oídos abiertos en el caso de que se fueran a encontrar con un oso.

De pronto, detrás de una roca saltó el oso de la apariencia más feroz que vieran jamás. Parado ante ellos, el oso gruñó como un león, haciendo un eco de un sonido horrible que rebotaba en las paredes. Los dos asustados muchachos corrieron a la entrada de la cueva con el oso rugiéndoles detrás. Entonces uno de los muchachos se dejó caer en el suelo, con rapidez se desató las botas de escalar, se las quitó y se puso las zapatillas de correr.

Su amigo le gritó: ¡Apúrate! ¡Salgamos de aquí! ¿Por qué se te ocurre cambiarte de zapatos? De todas formas, ¡no tenemos muchas posibilidades de correr más rápido que el oso!.

Poniéndose de pie enseguida y comenzando a correr, el primer joven dijo: Yo no tengo que correr más rápido que el oso, tengo que correr más rápido que tú.

Vía Renuevo de Plenitud

Tuve oportunidad de leer este escrito en dos escenarios. En la página de dónde la extraje y señalada en la referencia, y en el libro de “Gerencia Estratégica” de Fred Davis. En el primer escenario se habla de que los amigos no se dan la espalda. En el segundo escenario se habla de que son dos competidores, y cómo el ser proactivo ayuda a la sobrevivencia empresarial.

lunes, 6 de julio de 2009

e.f.t. (tapping)

¿Has observado la cantidad y variedad de pesadas cargas que arrastras en tu vida?. Muchas de esas cargas ni tan siquiera te pertenecen, o bien ya no representan más que un estorbo en tu proceso de aprendizaje…

Con demasiada frecuencia, estamos siendo esclavos de emociones del pasado, que de forma insistente, surgen repentinamente sin que seamos conscientes del porqué.

Afortunadamente, han aparecido y siguen apareciendo técnicas que nos ayudan a combatir determinados estados emocionales, tales como miedo, ansiedad, tristeza, ira, fobias…, que son la causa única y real de nuestras deficiencias externas.

Dichas técnicas, tienen la facultad de provocar una verdadera sanación, pues tratan principalmente la raiz del problema, o sea, resuelven ese estado interno o mental específico, como método de “curación” de los síntomas externos.

Todo ser humano tiene derecho a ser feliz, a buscar su felicidad y a encontrar el modo de hacer ésto posible en su vida cotidiana, de una forma armónica y no agresiva. Nuestras emociones, son la principal fuente de bienestar o sufrimiento, y nuestra voluntad para trabajar sobre las mismas, para pulirlas o moldearlas, termina por convertirnos en los únicos responsables de lo que somos y de lo que buscamos ser; en definitiva, acaba trazando esa línea sutil entre el de dónde vengo, y el a dónde quiero dirigirme, que es tarea única de cada uno de nosotros.


Cada vez que me hago la pregunta “qué quiero en mi vida”, estoy abriendo la puerta a la posibilidad, a la expectativa, a la sorpresa, a la esperanza. Y no siempre sabemos responder a esta pregunta. Sin embargo, si me cuestiono “qué no quiero en mi vida”, es seguro que tú, al igual que yo, eres capaz de encontrar aspectos, emociones, relaciones o vivencias, que preferirías dejar atrás de una vez por todas.

Si somos capaces de vaciar, estamos liberando espacio para poder llenar, para poder incluir, para poder atraer o ponernos en marcha hacia aquello que en cada instante, en “cada Aquí y Ahora”, sea lo que realmente deseamos. Soltar lastre, liberarnos de mochilas innecesarias, es la mejor forma de poder volar o caminar ligeros. Y ese ponernos en marcha, ese movimiento, es, casi siempre, más positivo que la inacción. No movernos, primero nos oxida, y a la larga nos destruye. Permitir que la inercia nos arrastre, puede frenarnos cuando menos lo deseemos, o precipitarnos hacia situaciones indeseadas.

Tenemos capacidad suficiente para tomar las riendas de nuestras vidas, sin embargo, aunque todo individuo dispone de las herramientas necesarias (cuerpo, mente y emociones) para alcanzar la máxima expresión de sí mismo, con frecuencia sucede que las relaciones entre estos tres poderosos elementos, no son todo lo fluidas y amistosas que sería de desear.

En nuestras manos está dar el paso desde el “yo soy así”, al “yo soy el que quiero ser”, y aquí es donde la técnica del E.F.T. juega un papel protagonista, pudiendo ayudarnos a dar ese gran salto…

“Tú y yo estamos a punto de iniciar un viaje hacia la libertad emocional. No será igual a nada de lo que hayas experimentado antes. Lo prometo. No es un viaje mítico sobre una alfombra mágica que termina en ilusión. Es un verdadero viaje, destinado a darte verdaderos resultados. Ciertamente desarrollarás la habilidad de desechar tus miedos, fobias, recuerdos traumáticos, culpa, enojo, penas, y todas las otras emociones limitantes. Y tampoco llevará años de sesiones dolorosamente lentas y económicamente agotadoras. A menudo, hasta las emociones negativas más severas, se desvanecen en minutos. Pero me estoy adelantando…”. (Gary H. Craig –descubridor de la técnica E.F.T.-).

breve historia de la e.f.t.

E.F.T. (Emotional Freedom Techniques = Técnicas para la Liberación Emocional), nació en 1991 de la mano del ingeniero americano Gary H. Graig, tras haber estado estudiando con Roger Callahan. Este último había desarrollado una técnica llamada T.F.T. (Thought Field Therapy) -derivada a su vez de la kinesiología aplicada-, que consiste en localizar mediante un test muscular, los puntos de acupuntura adecuados para tratar y desbloquear la emoción sobre la que estamos trabajando.

Gary Craig tuvo la idea de coger un conjunto básico de puntos, y tratarlos todos siempre, fuera cual fuera la emoción, evitando así la necesidad de localizar los puntos. Y funcionó.

En 1999, publicó sus excelentes videos de formación (disponibles en inglés en su web: www.emofree.com), y ese fue el momento de su gran expansión.

A pesar de su corta historia, E.F.T. está teniendo ya una gran aceptación entre psicólogos, psiquiatras y otros terapeutas en todo el mundo, aunque especialmente en EEUU y Reino Unido, como podemos ver en su página web, la cual es, a su vez, una auténtica base de datos sobre casos reportados por practicantes de todo el mundo en diversas temáticas.

¿qué es e.f.t.?

Dicho sencillamente, es una versión emocional de la acupuntura, con la excepción de que no se emplean agujas, sino que en su lugar, se estimulan en el cuerpo ciertos puntos meridianos de energía, golpeándolos suavemente con las yemas de los dedos (hacer tapping).

Desafortunadamente, nunca conoceremos a algunos de los benefactores de la técnica, puesto que sus contribuciones fueron hechas hace más de 5.000 años. Estas personas brillantes, descubrieron y trazaron la pieza central de E.F.T.; es decir, las energías sutiles que fluyen a través del cuerpo.

Estas energías sutiles, también son la pieza central de la acupuntura, y, como resultado, ambas técnicas están emparentadas. Ambas disciplinas están creciendo rápidamente, y, con el paso del tiempo, ambas están destinadas a ejercer un papel central en las curaciones, tanto emocionales como físicas.

Nuestros cuerpos tienen una naturaleza básicamente eléctrica. Cualquier curso inicial de anatomía, cubre esto. A veces, cuando caminas sobre una alfombra, el contacto hace que se produzca una “fricción”, podrás ver entonces la electricidad estática que se descarga desde la punta de tu dedo, o salen chispas al tocar otro objeto… esto no sería posible si tu cuerpo no tuviera una naturaleza eléctrica.

Nuestros sistemas eléctricos son vitales para nuestra salud física, cuando la energía deja de fluir, nos morimos. Esta energía fluye a través del cuerpo, y es invisible al ojo humano, pero no por ello inexistente, pues es posible observarla con un equipo de precisión.

La ciencia médica occidental tiende a enfocarse en la naturaleza química del cuerpo, y no ha puesto demasiada atención a esos flujos sutiles, pero poderosos. Sin embargo, esos flujos existen, y comienzan a atraer a un creciente número de científicos e investigadores.

En el trabajo con E.F.T., hacemos uso de nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestras emociones, para valernos del completo potencial de que disponemos para ser los diseñadores de nuestra vida, para ser los creadores de nosotros mismos. Y si como yo, estás absolutamente convencido de que tenemos derecho a ser felices, E.F.T. nos brinda una maravillosa herramienta para acceder al reino de nuestras posibilidades ilimitadas.


El procedimiento es rápido, sencillo y portátil, de modo que se puede hacer en cualquier lugar y en cualquier momento.

Dice su descubridor, que "La causa de toda emoción negativa, es una ruptura en el sistema energético del cuerpo", de ahí que éste sea el principio sobre el que se asientan las bases de la técnica.

Dice asímismo, que "Las principales colaboradoras de la mayoría de las enfermedades y dolores físicos, son nuestras emociones negativas no resueltas".

E.F.T. es un instrumento poderoso para trabajar sobre aquellos elementos, casi siempre de origen emocional, que no deseamos en nuestras vidas. Es un método de limpieza, de purificación y liberación, que nos permite deshacernos de las consecuencias indeseables de emociones que no controlamos, proporcionándonos la libertad para llegar a comprender de un modo distinto, de observar desde la distancia, o dicho de otro modo, convertirnos en los observadores al tiempo que en los observados, para, finalmente, poder avanzar y evolucionar.

Descubrir que una fobia puede desaparecer prácticamente en una sesión; una depresión empezar a cambiar desde la primera, y mejorar espectacularmente con unas pocas más; o que el dolor físico puede obtener una respuesta inmediata en apenas unos minutos, nos invita a cuestionarnos si verdaderamente existen límites en nuestro potencial, y, en último extremo, preguntarnos cuán responsables somos de los acontecimientos que vivimos.

Se puede hacer “tapping” con una gran variedad de problemas físicos y emocionales. En realidad, y como dice Gary Craig, “pruébalo con todo” y evalúa tus propios resultados.

De forma genérica, E.F.T. se utiliza para el tratamiento de:

  1. Dolor emocional / Estrés postraumático
  2. Miedos / Fobias / Pánico / Ansiedad / Inseguridad
  3. Ira / Culpa / Rencor / Frustración
  4. Estrés / Compulsión / Adicciones
  5. Apatía / Depresión
  6. Dolor de cabeza / Dolor físico en general / Alergias
  7. Tratamiento del componente psicosomático de las enfermedades
  8. Mejora de la capacidad de aprendizaje / rendimiento profesional / rendimiento deportivo
  9. Mejora del bienestar vital en general, de la sensación de control en nuestra vida, y de la efectividad del trabajo con pensamiento creativo.
  10. Como herramienta de introspección y meditación.

No obstante, E.F.T. es una técnica de desarrollo y crecimiento personal, que en ningún caso debe sustituir o reemplazar al médico o profesional de la salud correspondiente.

Debes recordar que la utilización de estas técnicas, es un tema de tu propia y exclusiva responsabilidad.

Nunca debes suspender un tratamiento, ni realizar modificaciones en la pauta, sin consultar previamente con tu médico.

¿en qué consiste la técnica?

E.F.T. es un método para eliminar el malestar emocional, extremadamente efectivo en la práctica, y a la vez tan sencillo que prácticamente cualquier persona puede aprenderlo, y usarlo en su experiencia cotidiana.

El método es tan simple como estimular una serie de puntos de acupuntura (puntos energéticos o meridianos), dando golpecitos con las yemas de los dedos, manteniéndonos mentalmente enfocados en una emoción dolorosa, y la situación concreta que la provoca, al tiempo que empleamos una frase de afirmación, que es utilizada como recordatorio del problema.

Se realizan varias rondas completas, trabajando siempre con la misma emoción, y al final de cada una de las rondas, se evalúa el grado (del 1 al 10) de malestar (o sufrimiento en muchos casos) que causa dicha emoción ó situación. El objetivo es que con cada una de las rondas, vaya disminuyendo la intensidad del dolor, hasta que finalmente, desaparezca.

Dependiendo de la persona, y de la profundidad de su “herida”, la emoción negativa se podrá eliminar en una sola sesión, o se precisará de un número indeterminado de ellas (normalmente no va más allá de unas pocas semanas).

Evidentemente, la técnica exige un trabajo de búsqueda interna por nuestra parte, desde el punto de vista de identificar donde se encuentran nuestros bloqueos mentales, y cuáles fueron las situaciones específicas que los generaron… únicamente mediante la comprensión y aceptación de nosotros mismos, podremos deshacer dichos bloqueos.

Muchos de nuestros problemas, tienen su origen en la infancia: lo que vimos, lo que nos dijeron y lo que experimentamos, fue lo que configuró nuestro sistema de creencias. Posteriormente, entrados ya en nuestra etapa adulta, no hacemos más que recrear y proyectar (inconscientemente) aquellas situaciones y comportamientos que nos reafirman en nuestras creencias erróneas para las que fuimos “programados o entrenados”: por ejemplo, una persona con dificultades para encontrar trabajo, probablemente durante los primeros años de su vida, escuchó a sus padres afirmar cosas como “eres una inútil, o nunca vas a encontrar un buen trabajo, o no sirves para nada…”… es en estos casos donde el E.F.T. está especialmente indicado.

La técnica se compone de 4 secuencias diferentes. Es imprescindible respetar el orden en que son ejecutadas, y no debe ignorarse ninguna, puesto cada una de ellas satisface un propósito específico.

1. La preparación: Es fundamental en el proceso, ya que prepara al sistema energético para que el resto de la “receta” pueda hacer su trabajo. Mediante la preparación, se asegura que el sistema energético está correctamente orientado antes de tratar de eliminar sus trastornos (causa de las emociones negativas).

La preparación, consiste, por un lado, en golpear o estimular con las yemas de los dedos (todos, o índice y corazón, preferentemente de tu mano dominante), el punto de Karate de la otra mano, ubicado en el centro de la parte carnosa del exterior de ésta (observa el punto al que me refiero en el dibujo que aparece más abajo –mano-).

Por otro lado, y durante tres veces seguidas, repetimos en voz alta la siguiente afirmación: “Aunque tengo este ……. (espacio que deberás rellenar con tu problema específico, con una breve descripción)……., me amo y me acepto profunda y completamente”.

Ejemplo: “Aunque tengo problemas para conseguir un buen trabajo, me amo y me acepto profunda y completamente”, no olvides golpear al mismo tiempo el “punto karate”, y repetir la frase tres veces seguidas.

Puedes utilizar cualquier afirmación, siempre que siga este formato general, que reconoce el problema, y provoca una auto-aceptación a pesar de la existencia del mismo, lo cual es fundamental para que la afirmación sea efectiva.

No importa si crees en la afirmación o no, limítate a repetirla. En lo posible, es mejor decirla con sentimiento y énfasis, pero repetirla de manera rutinaria, por lo general será igualmente efectiva.

puntos meridianos de e.f.t.

puntos meridianos de e.f.t.

A continuación…

2. La primera secuencia (recordatorio): Es muy sencilla en concepto. Consiste, como antes, por un lado en estimular o dar golpecitos con las yemas de los dedos sobre los puntos que figuran en los dibujos de arriba (mujer y mano), todos, incluído el punto karate, que ya ha sido empleado en la fase de la “preparación”, y que en este caso, será el último, cerrando la secuencia. Los puntos van de arriba hacia abajo, siempre en el mismo orden.

Los puntos son bilaterales, por lo que no importa qué lado golpeas, pero ten en cuenta que los golpes, es mejor efectuarlos con la mano dominante (derecha para los diestros, e izquierda para los zurdos).

Y por otro lado, empleamos nuevamente una frase recordatorio, que repetiremos 7 veces por cada meridiano o punto de los que se indican en las dos imágenes . En este caso, la frase será muy corta, y podrá ir variando con cada punto.

Ejemplo: (siguiendo con el mismo supuesto de una persona con dificultades para conseguir un empleo).

Coronilla: “No encuentro trabajo”
Ceja: “Soy una inútil”
Lado Ojo: “No sirvo para nada”
Bajo Ojo: “Mis padres ya lo decían”
Bajo Nariz: “No tengo trabajo”
Barbilla: “Me cuesta mucho conseguir trabajo”
Clavícula: “Me resulta imposible conseguir un buen trabajo”
Pecho: “No sirvo para nada”
Bajo Brazo: “Soy basura”
Dedo Pulgar: “Nunca voy a encontrar trabajo”
Dedo Índice: “Mis padres tenían razón”
Dedo Corazón: “No encuentro trabajo”
Dedo Meñique: “Soy un desastre”
Punto Karate: “No sirvo para nada”

A continuación…

3. La segunda secuencia (positiva): Exactamente igual que la anterior “primera secuencia, o secuencia recordatorio”, pero esta vez empleando afirmaciones positivas, que serán las que sustituirán a nuestras viejas creencias, y que también debemos repetir siete veces en cada punto energético.

Ejemplo: (continuando con el mismo supuesto)

Coronilla: “Muy pronto voy a conseguir el trabajo que deseo”
Ceja: “Soy muy útil en esta sociedad”
Lado Ojo: “Yo soy perfectamente válida”
Bajo Ojo: “Mis padres estaban equivocados”
Bajo Nariz: “En pocos días voy a conseguir un empleo”
Barbilla: “Encontrar trabajo es muy sencillo”
Clavícula: “La creencia en la dificultad, es sólo una ilusión”
Pecho: “Yo soy valiosa”
Bajo Brazo: “Yo soy útil”
Dedo Pulgar: “El trabajo que me apasiona está esperándome”
Dedo Índice: “Mis padres a veces se equivocan”
Dedo Corazón: “Alguien me va a ofrecer un buen trabajo”
Dedo Meñique: “Dejo atrás mis creencias limitantes”
Punto Karate: “Yo sé hacer muchísimas cosas de gran utilidad”

A continuación…

4. El procedimiento de los nueve rangos: Esta, es quizá la parte de todo el proceso que se percibe más extraña. Tiene como objetivo “afinar” el cerebro, y lo hace a través de algunos movimientos de ojo, tararear un poco, y contar rápidamente del 1 al 5.

A través de los nervios conectivos, ciertas partes del cerebro son estimuladas cuando se mueven los ojos. Asímismo, el lado derecho del cerebro (lado creativo), está involucrado cuando tarareas una canción (hacerlo con la boca cerrada, o canturrear ta-ra-ra-ra-ra), y el lado izquierdo (lado digital), se acciona, entre otros, cuando contamos, matemáticamente hablando.

punto rango en e.f.t.

El punto a estimular en este caso, será el “punto rango o escala”, que es el punto que se localiza sobre el dorso de la mano, entre los nudillos de los dedos anular y meñique, en una pequeña depresión en dirección hacia la muñeca, aproximadamente a 1 centímetro y medio por encima de los nudillos (ver imagen izquierda).

Debes ejecutar las nueve acciones diferentes que a continuación se indican, lo más rapidamente posible, al tiempo que estimulas mediante los golpecitos el Punto Rango:

1º Cerrar los ojos
2º Abrir los ojos
3º Mirar rápidamente hacia abajo, a la derecha, sin mover la cabeza
4º Mirar rápidamente hacia abajo, a la izquierda, sin mover la cabeza
5º Girar los ojos en círculo en el sentido de las agujas del reloj
6º Girar los ojos en círculo en el sentido contrario al de las agujas del reloj
7º Tararear dos segundos una canción (Gary Craig sugiere el “Happy Birthday to you”)
8º Contar rápidamente del 1 al 5
9º Tararear de nuevo 2 segundos la misma melodía

Es preciso respetar el orden de las acciones, no lo varíes. Una vez terminado, cierra los ojos, y respira profundamente 3 ó 4 veces.

Te he presentado aquí una ronda completa (con sus cuatro secuencias) de tapping. Puede parecer, en un principio, algo complejo, pero con un mínimo de práctica, verás que no lleva más de 10 minutos.

Una vez terminada la primera ronda, vuelve a cerrar los ojos, conéctate nuevamente con la emoción negativa, y puntúa otra vez del 1 al 10.

Como he dicho anteriormente, puedes repetir la ronda varias veces, se aconseja que no sean más de tres por sesión… en cualquier otro momento del día, o al día siguiente, puedes comenzar de nuevo. Lo importante es que insistas, hasta que la intensidad de la emoción esté en 1 ó en 0.

Como quizá te estés planteando, las posibilidades del E.F.T., son infinitas, es posible emplear la técnica para cualquier cosa que nos cause malestar… la pauta: en primer lugar aceptar la situación, y a continuación modificarla.

En la práctica habitual, a partir de la segunda o tercera ronda, deberías notar cierto alivio, ese será el momento en el que tanto en la frase de “la preparación”: “Aunque tengo problemas para conseguir un buen trabajo, me amo y me acepto profunda y completamente”, como en las frases de la “secuencia recordatorio”, sustituirás el “aunque tengo problemas…”, por “aunque todavía tengo algún pequeño problema…”, se trata de sustituir lo absoluto (tengo problemas), por lo relativo (algún pequeño problema), puesto que la intensidad de la emoción habrá disminuído.

Recomiendo que las frases, tanto de la “secuencia recordatorio”, como de la “segunda secuencia (positiva)”, estén personalizadas en lo posible. Utiliza siempre frases y palabras que verdaderamente tengan significado para ti, que realmente despierten tus emociones, tanto negativas (primera secuencia), como positivas (segunda secuencia).

Por otra parte, es aconsejable, además, desmenuzar cada problema en cada uno de los eventos específicos que los causaron, no globalices, pues no verías los resultados con la misma rapidez. Comenzar por las emociones más intensas, en muchas ocasiones lleva implícito que durante el proceso, acaben desapareciendo algunas emociones de menor intensidad, derivadas de la primera.

Hasta aquí lo que yo he podido aprender y experimentar mediante el empleo de esta maravillosa herramienta, conocida comúnmente como “tapping”… espero pueda ser de utilidad para ti.

Referencias bibliográficas:

    • Libro de Técnicas de liberación emocional ”, Carla Valencia, Paperback
    • E.F.T.: manual de técnicas de Liberación Emocional ”, Gary Craig
    • Aventuras con E.F.T. ”, Silvia Hartmann, Ediciones Grixó
    • Terapia del Estrés, Fobias y Adicciones ”, Luís J. González, Edizioni del Teresianum (Roma)

ondas cerebrales

El cerebro humano, se caracteriza por el desarrollo de lo que se llama "córtex cerebral", que es la parte más exterior del encéfalo, y que tiene una textura rugosa y un aspecto parecido al de la mitad de una nuez.

Gracias al córtex, tenemos pensamiento abstracto, creencias y capacidad de previsión de futuro, entre otras cosas.

Desde el punto de vista del sistema nervioso, es precisamente el córtex cerebral el que diferencia a la especie humana del resto.

En segundo lugar, debemos apreciar que nuestro cerebro funciona básicamente con energía bio-químico-eléctrica.

Aunque la potencia de la electricidad que manejan nuestras neuronas es baja (se mide en milivoltios), dicha potencia le es suficiente para procesar, manejar, distribuir y usar grandes cantidades de información y generar un número de respuestas practicamente infinito.

Así que al usar micro-electricidad, podemos concluir que el cerebro es una máquina de bajas frecuencias. Asímismo, donde hay electricidad, hay electromagnetismo, y donde hay electromagnetismo, hay frecuencias que se emiten hacia el exterior, o que se reciben de él.

Esto significa que nuestro cerebro, aparte de procesar la información que le viene dada por los sentidos, es capaz de emitir o recibir información extra-sensorial, vía "ondas electromagnéticas", similares a las frecuencias de una emisora-receptora de radio, o sea que nuestro cerebro, puede actuar en cierta medida como una estación de radio.

Podemos definir la mente como el "sentido" del cerebro, (al igual que la vista es el sentido del ojo )…

el descubrimiento de las ondas cerebrales

La investigación en el campo de la consciencia, tiene una gran deuda con el científico alemán Hans Berger, quien, en la década de 1920, descubrió las ondas cerebrales y su relación con diferentes estados de consciencia.

Gracias a su trabajo pionero, ahora sabemos que el cerebro emite tenues impulsos eléctricos, que pueden ser medidos en microvolts, mediante un electroencefalograma o EEG. Concretamente, los investigadores adhieren electrodos al cuero cabelludo de los sujetos sometidos a exámen, y los conectan al EEG, el cual dispone de un amplificador que aumenta los pequeños potenciales eléctricos hasta diez millones de veces.

Antes que él, el médico inglés Richard Caton (1842-1926), demostró potenciales parecidos en perros.

Los primeros tipos de frecuencia que se descubrieron fueron las alpha y las theta, estudios que fueron completados posteriormente con el descubrimiento de las ondas delta, beta y ram-alta.

Cada tipo de onda, se traduce en un estado psico-neuro-fisiológico diferente. Es decir, nuestra mente, nuestro cuerpo y nuestra actividad física y fisiológica, es completamente diferente en cada uno de estos estados o frecuencias; el cerebro desempeña funciones específicas en cada uno de ellos, de manera que, dependiendo del nivel de las ondas cerebrales en que se encuentra el cerebro, nos resulta posible desempeñar plenamente ciertas funciones como sería el sueño, la concentración o la profunda meditación…

El cerebro es la más potente de las computadoras, por diferentes medios, puede ser conducido a ondas delta, theta, alpha o beta.

el estado delta

Entre 10 y 50 microvoltios.

De 0,2 a 3,5 Hz (ciclos por segundo).

Estado hipnótico, hemisferio cerebral derecho en plena actividad. Sueño profundo sin ensueños, fase REM del sueño.

Las ondas delta están relacionadas con nuestra capacidad para integrar y dejar pasar, en este estado se refleja la mente inconsciente.

Es el ritmo dominante en los recién nacidos hasta un año de edad, y está presente en las etapas tercera y cuarta del sueño.

Se inducen con el propósito de reducir nuestra percepción del mundo físico, y tener acceso a la información en nuestra mente inconsciente.

el estado theta

Entre 50 y 100 microvoltios.

De 3,5 a 7,5 Hz.

Estado de relajación profunda, meditación, creatividad, asociación de ideas, memoria.

Es el ritmo dominante en un estado de somnolencia. Aparece cuando nos deslizamos hacia la inconsciencia o hacia el sueño en un estado superficial. Es el estado de conciencia de sueño experimentado como sueños, visiones y sueño consciente.

Aparece también en los estados de meditación profunda, intensa creatividad, en los fenómenos de percepción extrasensorial y bajo los efectos de la anestesia.

Están asociadas a los estados de alucinación creadora y resolutivos.

Es la onda de la imaginación y del contacto dinámico con otras posibles dimensiones, ofreciéndonos la oportunidad de la investigación de nuestra personalidad y de las profundidades de nuestra psicología. Nos muestra la actividad del genio creador.

A través de ella, la persona puede llegar a descubrir sus más profundos secretos.

Esta frecuencia es "emitida" por los discípulos de la filosofía zen, los monjes budistas o los religiosos cristianos en sus meditaciones, cantos u oraciones.

el estado alpha

Entre 100 y 150 microvoltios.

De 7,5 a 13 Hz.

Es la mente subconsciente. Ausencia de estrés, relajación, creatividad, percepción, meditación.

Predomina el hemisferio derecho (intuitivo, no verbal, sentimientos). Inicio de actividad del hemisferio izquierdo y desconexión del hemisferio derecho. Ambos hemisferios se integran, uniendo pensamiento concreto y analítico -lóbulo izquierdo del cerebro-, con pensamiento abstracto y creativo -lóbulo derecho-. Nos situamos en la frontera entre lo consciente y lo inconsciente.

Es la puerta entre ambos estados de conciencia y esto hace del estado alfa un estado muy especial, ya que nos permite, por un lado, seguir teniendo una actividad consciente de nuestro pensamiento y cuerpo, es decir, nos damos cuenta de lo que pensamos y sucede a nuestro alrededor, y por otro lado, al encontrarse nuestra conciencia en los "pisos bajos" de la mente, nos permite acceder a la información y estados propios del subconsciente, pudiendo aprovechar todo el caudal de ese 90% de "potencia" mental que reside en lo subconsciente.

Dicho estado es un "estar a gusto" en paz y felicidad interior, en relajación profunda. Aumenta mucho la capacidad de sugestión y autosugestión, esto es, cualquier cosa que nos sugieran en alfa, será más fácilmente admitida y con menos "filtros" por parte de nuestra racionalidad consciente.

el estado beta

De 150 a 200 microvoltios.

Entre 13 y 28 Hz.

Es la mente consciente. Recibe señales de nuestros cinco sentidos físicos (vista, oido, tacto, gusto y olfato). Predomina el hemisferio izquierdo (lógico, racional, verbal).

Corresponde a la vigilia, alerta, tension nerviosa o intelectual, receptividad hacia el mundo exterior, ansiedad y stress.

Está asociada con la atención enfocada, y el pensamiento activo de una mente vuelta hacia el mundo externo. En este ritmo se manifiesta el más alto grado de excitabilidad cortical. Mientras lees estás páginas, estás produciendo una buena cantidad de ondas beta.

Se inducen con el objetivo de aumentar la concentración, y agilizar el aprendizaje. Aumento de energía y productividad.

el estado ram-alta

Más de 200 microvoltios.

Por encima de los 28 Hz.

Estado de estrés y confusión.


¿existen formas de controlar y generar deliberadamente determinadas ondas cerebrales?

Uno de los métodos más sencillos y efectivos, es mediante el sonido (música, tonos, vibraciones, sonidos de la naturaleza, etc.). A eso se debe el uso de cánticos, plegarias con sonidos repetidos (como las letanías del rosario), himnos, campanas, tambores, etc., de los cuales se han valido todas las religiones y ritos a través de la historia.

El sonido puede hacer que sin ningún, o poco esfuerzo por nuestra parte, se alteren la ondas cerebrales, llevándonos rápidamente a distintos niveles de conciencia.

Existen actualmente en el mercado diferentes aparatos-generadores de ondas cerebrales. Las ondas enviadas por estas máquinas, armonizan su ritmo con las de nuestro propio cerebro (según ha quedado demostrado por diversos estudios con electroencefalogramas), ello permite producir a voluntad los estados mentales característicos de las diversas ondas cerebrales.

Recuerda que tu cerebro es una potente radio que emite y recibe... según lo que guardas dentro de “tu caja cerebral”, así es lo que seleccionas inconscientemente y recibes del exterior... el cerebro es una máquina que se "sintoniza" en determinadas frecuencias…

descargar el programa "Brainwave Generator"

INSTRUCCIONES PARA EL USO DEL PROGRAMA: El fichero “Bwgen.exe”, es el programa que reproduce los diferentes sonidos. No es preciso instalarlo en tu ordenador, simplemente al abrirlo, lo que abres es el reproductor, donde podrás escoger entre una variada lista de “ondas” de diversas frecuencias.

No es aconsejable su empleo durante más de 15 o 20 minutos por sesión. Si aprecias dolor de cabeza, se recomienda abandonar, o limitar el tiempo por sesión. Es imprescindible el uso de auriculares, debidamente colocados (derecha/izquierda). No es preciso tener el volumen muy alto, simplemente que sea perceptible a tus oídos.

p.n.l. (programación neurolingüística)

La P.N.L. significa Programación Neurolingüística. Surge a partir de la idea de considerar que el comportamiento del ser humano, se produce a partir de unos "programas mentales" que tienen que ver y que se asientan en el sistema nervioso, y que pueden ser modelados (copiados y modificados) a través del lenguaje.

Por Programación, se entienden nuestras aptitudes para producir y aplicar programas de comportamiento. Neuro, se refiere a las percepciones sensoriales que determinan nuestro estado emocional subjetivo. Lingüístico, se refiere a los medios de comunicación humana, tanto verbal como no verbal.

Si se interpreta el concepto literalmente, podemos pensar en la informática, en los ordenadores. Para comprender cómo se da el proceso de cambio, se puede imaginar a la persona introduciendo datos en el ordenador (cerebro), quien procesa, almacena y actualiza como las circunstancias lo requieren. Los datos son las experiencias sensoriales (lo aue se oye, siente, palpa…). Esto es procesado y almacenado.

Cuando se debe decidir cómo actuar ante determinada situación, los datos se actualizan, y se antepone el que decidirá cómo tomar la decisión. La P.N.L. parte de una experiencia sensorial específica almacenada en el cerebro. Lo importante para trabajar con ella, es conocer la estructura y las condiciones en las que se procesó y almacenó la experiencia. No respondemos directamente a los que denominamos la realidad, sino sobre nuestra representación de ella, que es nuestro “mapa personal”, y que es distinto para cada individuo.

La P.N.L. se origina en la década de los 70, en la Universidad de California. Surge de las investigaciones de dos jóvenes: Richard Badler (informático, matemático y pshicólogo gestáltico), y John Grinder (lingüista), dedicados a estudiar los patrones de conducta de los seres humanos.

El origen de sus investigaciones, fue la curiosidad por entender cómo a través de la comunicación y el lenguaje, se producían cambios en el comportamiento de las personas.

Partieron del principio de que las estructuras en las que se basan los trabajos de terapeutas eficaces, se pueden descubrir y, una vez comprendidas, se pueden reproducir y enseñar. El conjunto de los patrones que modelaron, y sus influencias intelectuales, dieron origen a la PNL.

Podemos considerar la P.N.L., como el sofware del cerebro humano. Es el estudio de la experiencia humana subjetiva, cómo organizamos lo que percibimos y cómo revisamos y filtramos el mundo exterior mediante nuestros sentidos.

Esta técnica describe cómo la mente trabaja y se estructura, cómo transmitimos nuestra representación del mundo a través del lenguaje; cómo las personas piensan, aprenden, se motivan, interactúan, se comunican, evolucionan y cambian.

Mediante el estudio detallado de la comunicación, la P.N.L. nos ofrece una maravillosa herramienta de autoconocimiento y evolución personal.

Originalmente concebida para los procesos terapéuticos, los resultados que se sucedieron en forma extraordinaria lograron que su utilización trascendiera esa frontera. Médicos, psicólogos, educadores, profesionales de distintas áreas y empresas de gran envergadura, aplican actualmente la P.N.L., tanto para el desarrollo individual, como para la optimización de cada grupo humano.

Todo lo que es la P.N.L.:

  • Es una disciplina para aprender a cambiar en un mundo cambiante. Por eso es que invita a cada quien para que cree su propio espacio de experiencias (las que sean de su interés).
  • Es un modo de reflexionar sobre las ideas, y acerca de las personas.
  • Es un apoyo en la comunicación humana efectiva, ya que ayuda a entender y compartir con otras personas. A veces preguntamos algo, y lo que nos contestan no se corresponde, o bien, respondemos y sucede que no es comprendido como deseamos unos y otros.
  • Es una herramienta que nos ayuda a mejorar el aprendizaje.
  • Es un esquema general práctico cuya finalidad es sernos útil, aumentar las opciones y conocernos mejor.
  • Es un modelo y conjunto de elementos que ayudan a conocer y mejorar el comportamiento humano, y su desempeño en la vida diaria.
  • Es una disciplina de superación holística para mejorar la calidad de la vida: de uno mismo, de los demás y del medio, para convivir desde el respeto y la armonía.
Ahora veremos de qué manera funcionan las personas. Existen tres tipos: los visuales, los auditivos y los kinestésicos.

Los visules

Una persona visual, le otorga importancia al vestir bien, con una cuidada apariencia física.

Son aquellos cuyas preferencias se declinan por todo aquéllo que sucede en el mundo exterior, "lo que se ve". Son los que necesitan ser mirados cuando les estamos hablando o cuando lo hacen ellos, es decir, tienen que ver que se les está prestando atención. Necesitan ser mirados para sentirse queridos, son las personas que dicen cosas como "mira...", "necesito que me aclares tu enfoque sobre...". Hablan más rápido y tienen un volumen más alto, piensan en imágenes y muchas cosas al mismo tiempo.

Generalmente empiezan una frase y antes de terminarla pasan a otra, y así constantemente, van como picando distintas cosas sin concluir las ideas, e inclusive no les alcanzan las palabras; de la misma manera les ocurre cuando escriben.

Los auditivos

Son aquellas personas que escuchan, que se expresan principalmente de manera verbal, y su lenguaje está marcado por el uso de las palabras que denotan interés por todo aquello que sea audible.

Estas personas tienen un ritmo intermedio, no son ni tan rápidos como los visuales, ni tan lentos como los kinestésicos.

Son los que necesitan un "aha...", "mmm...", es decir, una comprobación auditiva que les dé la pauta que el otro está con ellos, que les presta atención. Además son aquellos que usan palabras como "me hizo click...", "escúchame...", "me suena...", palabras que describen lo auditivo.

Los auditivos piensan de manera secuencial, una cosa por vez, si no terminan una idea no pasan a la otra. Por eso más de una vez, ponen nerviosos a los visuales, ya que estos van más rápido, el pensamiento va más rápido. En cambio, el auditivo es más profundo comparado con el visual. Este último es más superficial, pero puede abarcar más cosas a la vez, por eso es también el que hace muchas cosas a la vez.

Los kinestésicos

Son quienes utilizan los sentidos.

Tienen mucha capacidad de concentración, son los que más contacto físico necesitan. Son los que nos dan una palmadita en la espalda y nos preguntan "¿cómo estás?"; además, son los que se van a sentir atendidos cuando se interesen por alguna de sus sensaciones.

Usan palabras como "me siento de tal manera...", "me puso la piel de gallina tal cosa..." o "me huele mal este proyecto...".

Todo es a través de sensaciones.

Todos disponemos de los tres sistemas representacionales, y a lo largo de la vida, vamos desarrollando en mayor grado uno que los demás. Esto dependerá de diferentes cosas: de las personas que tenemos alrededor, de la experiencia laboral, inclusive hasta de los docentes. Existen familias más visuales, más auditivas o kinestésicas.

Gran parte del éxito personal y profesional de cada uno de nosotros, depende de que aprendamos a trabajar los tres canales armónicamente. Cuando logramos llegar a todo el mundo a través de los tres canales (visual, auditivo y kinestésico), entramos en empatía con los demás.

Uno de los orígenes de nuestras actitudes (hacia los demás, hacia el dinero, hacia el sexo, la familia…), son nuestros “mapas mentales”, esas construcciones que nos bloquean y nos imposibilitan el éxito en cualquier ámbito de la vida.

En la actualidad, disponemos de aparatos carísimos y sofisticados capaces de detectar cualquier dolencia en el ser humano. Sin embargo, las personas estamos más enfermas que nunca, y en la mayoría de los casos, todo lo que precisamos para sanar, son unas cuantas sesiones de hipnosis positiva.

El instrumento utilizado en este caso, son las palabras positivas que penetran profundamente en la mente, provocando una reacción interior en cadena. Los cambios son asombrosos, y la persona puede recuperarse de sus dolencias físicas, emocionales y mentales.

El efecto extraordinario, se produce en un estado de concentración relajada y profunda, donde las palabras se convierten en pensamientos y emociones, transformándose seguidamente en actos apropiados.

Constantemente las personas estamos autoprogramándonos, enviándonos palabras y pensamientos a nuestro “fondo mental”. Este hecho puede originar buenas o malas imágenes, positivos o negativos programas mentales…

“No puedo”, “tengo miedo”, “no soy capaz”… son algunas de las señales que enviamos al receptor de nuestra mente, produciendo películas muy negativas y limitantes en nuestra vida.

Por tanto, de la calidad de nuestros pensamientos y las emociones que éstos despiertan en nuestro interior, dependerá la calidad de vida que tendremos.

Los científicos han descubierto que desde la tercera semana de gestación, el ser humano puede ser ya un fracasado… aún no ha nacido, y ya comienza a escuchar la palabra “no”.

Las veces que nuestro cerebro escuchó la palabra “no”, lo asumió como algo cierto y real. Lo que hace la P.N.L., es reprogramar nuestro “disco duro” o cerebro, a fin de extraer ese Ser Superior que todos llevamos dentro.

Uno de los pilares fundamentales de la P.N.L., consiste en aumentar la autoconfianza, a partir de reconocer el poder de nuestra mente; mostrarnos que tenemos un cerebro sin estrenar, con un poder infrautilizado (nuestro subconsciente), para comenzar a ampliarlo, a proyectarlo. Asímismo, la P.N.L. mejora la comunicación, nos ayuda a encontrar recursos desaprovechados, aumenta considerablemente nuestra creatividad, mejora nuestra salud, nos ofrece la posibilidad de cambiar nuestro sistema de creencias (en el caso de las que nos son negativas), y nos ayuda a vivir en el AQUÍ y AHORA.

Para comenzar el proceso, hemos de comprender que nuestra vida está marcada por nuestros pensamientos… nuestras creencias convierten nuestros pensamientos en nuestras realidades. La P.N.L. está basada en la tesis de que pensar equivale a hacer.

El ser humano es un estado de energía, y este nivel aumenta cuando tenemos pensamientos positivos y de felicidad. De igual forma, disminuye cuando tenemos sentimientos negativos o de melancolía… el pensamiento es una energía poderosa que bloquea o ayuda, según el caso.

¿Cómo hacer que funcione la P.N.L.? Existen muchas piezas sueltas, como en un rompecabezas. Los motores funcionan cuando todas las piezas encajan y funcionan en dirección a un mismo objetivo.

La primera pieza del rompecabezas es el entorno. Pero el entorno es algo más que lo que nos rodea, ya que comprende tanto al entorno exterior, como al entorno interior, es decir, tanto a los estímulos exteriores, como a las sensaciones físicas que se generan en nuestro interior. Los niveles de hormonas y de enzimas, tienen mucho que ver con este entorno interior. Evidentemente esto que se describe como el entorno interior, no tiene nada que ver con nuestro humor o nuestra actitud, que en realidad son los últimos componentes añadidos a nuestra experiencia. El entorno se refiere a los orígenes de las estimulaciones físicas, siendo internas o externas dependiendo de su localización.

La segunda pieza del rompecabezas, son las percepciones. Dependemos plenamente de las percepciones. Nuestros receptores sensoriales se encargan de trasladar varios tipos de estimulaciones físicas al interior de nuestro cerebro por medio de señales codificadas, que tienen que ser traducidas para que consigan un significado. Cuando un receptor determinado es estimulado por su energía exterior específica, envía una señal al cerebro, señal que deber ser descodificada. Estos receptores especializados se sitúan en nuestros sentidos y, así, podemos ver, oir, tocar, oler o saborear. No tenemos que confundir estas sensaciones con las emociones, ya que son dos dimensiones diferentes de la experiencia.


Esta información codificada, fluye a través de canales neurológicos hasta el cerebro. Cuando llega allí, estas señales son ensambladas en unidades codificadas llamadas 'momentos internos'. En circunstancias normales nuestro cerebro procesa entre 400 y 600 de estos momentos cada segundo, aunque puede oscilar entre 200 (cuando estamos muy relajados) hasta 1200 (si estamos muy excitados). Estos 'momentos internos' no tienen significado, ya que son simples representaciones de las señales originales generadas por los receptores sensoriales. Para darle un significado a estos 'momentos', el cerebro necesita comparar los nuevos 'momentos' con otros procesados con anterioridad (memoria). Diciéndolo de una manera muy sencilla, es como si nuestro cerebro dispusiera de un diccionario personal que va utilizando a medida que entran nuevas informaciones a las que trata de dar un significado. Podemos decir que el significado es la suma de un 'momento' y la memoria.

Pero una cosa es el significado que le da nuestro cerebro, y otra muy diferente la realidad objetiva. En su camino hasta el cerebro, muchos componentes son eliminados mientras que otros son añadidos. Aproximadamente entre el 75 y el 90% es consecuencia, no de la realidad, sino de nuestra historia personal. Vivimos en algo llamado 'el presente' y se supone que consiste en la relación entre lo que percibimos y lo que decimos que estamos haciendo. Es decir, el proceso es: significado = momento + memoria. Y ello produce lo que llamamos el estado presente, que es la tercera pieza del rompecabezas.

La cuarta pieza es el estado deseado, que está compuesto por nuestras creencias (¿qué es importante para mi?), nuestros valores (¿por qué esas creencias son importantes para mi?) y nuestras expectativas (¿cómo o cuando conseguiré esas creencias o valores?). Cuando nuestro cerebro genera un significado, este significado es comparado en relación con las creencias, valores y expectativas que tenemos en ese momento.

El producto de esta comparación son nuestras emociones, la quinta pieza del rompecabezas. Cada emoción que tenemos es un indicativo de si el estado presente se acerca o no a nuestro estado deseado. Cuando se acerca, nuestras emociones son satisfactorias, cuando no se acerca, las emociones son de sufrimiento. Las emociones son un simple 'feedback' entre lo que las cosas son y lo que deseamos que sean. Por lo tanto no hay emociones buenas o malas.

Nuestro cerebro combina estos elementos (estado presente, estado deseado y emociones) para crear lo que llamamos realidad, la sexta pieza. Realidad y entorno no es lo mismo, por supuesto. La realidad es un estado completamente subjetivo, consecuencia del significado que le hemos dado a la información que nos ha llegado a través de las terminaciones nerviosas de nuestros sentidos, una vez pasada esta información por los filtros de la memoria, unido al estado deseado y la comparación entre ambos. Nuestro conocimiento consciente aparece después de que se haya procesado el imput sensorial. La mente inconsciente, por su parte, ha recibido, filtrado, procesado y evaluado lo que le ha llegado del entorno.

Entonces, todo lo que queda es la selección de una respuesta conductual, la última pieza del rompecabezas. Nuestro cerebro elige una respuesta conductual entre todas aquellas que ha ido aprendiendo a lo largo de la vida. Aprendemos distintas vías para responder a la rabia, a la cólera, a la tristeza o a la felicidad.

Los anclajes son una técnica para aprender a guardar recuerdos positivos, y olvidar las experiencias negativas de nuestra vida. El ser humano es anclador por excelencia, y cada vez que sucede algo en un momento de una emoción muy fuerte, ese hecho marca toda nuestra vida. La P.N.L., nos enseña cómo convertirnos en ancladores positivos y conscientes, usando los tres canales de comunicación (visual, auditivo y kinestésico).

ejercicios

Alineación de los niveles neuro-lógicos

El siguiente ejercicio permite que todos los niveles estén alineados con respecto a un aspecto específico. Pide ayuda a una persona de confianza que te irá leyendo los pasos (despacio y dando tiempo a que proceses), o o los grabas tú mismo:

Ubícate en un espacio que te permita caminar unos 5 ó 6 pasos. Identifica la actividad ó aspecto específico.

  • Parándote en un lugar cualquiera. Piensa por varios segundos en tu medio ambiente, donde y cuando realizas la actividad en la que quieres ser más congruente: lugar, personas, objetos, tiempos.
  • Da un paso al frente. Este es el próximo nivel. Explora tu conducta. ¿Qué estás haciendo realmente?, ¿cuáles son tus acciones, movimientos, gestos, pensamientos?
  • Cuando estés listo, da otro paso al frente y piensa en tus capacidades y habilidades: ¿cuáles estás usando?, ¿estás usando todas las que tienes, o solo parte de ellas?.
  • Da otro paso al frente. Piensa en tus creencias y valores. ¿Porqué haces eso?, ¿qué es lo que te motiva?, ¿qué crees de las personas que están a tu alrededor?, ¿qué encuentras valioso de eso que haces?, ¿qué es lo importante para ti de esa situación?. Toma tu tiempo para pensar en las respuestas.
  • Un nuevo paso al frente y piensa en tu identidad. ¿Quién eres tu?, ¿qué te hace único/a, especial?, ¿cuál es tu misión en la vida?, ¿cómo tu actividad se conecta con la misión?.
  • Da un último paso. Piensa en lo que te conecta con otros seres vivientes. En lo que te conecta con algo espiritual. Puedes incluir si lo deseas tus creencias religiosas o fislosóficas. Tómate tu tiempo para pensar.
  • Mantén tu conexión con los pensamientos y da media vuelta. Regresa lentamente al punto de partida, deteniéndote unos segundos en cada punto, y sintiendo cómo se incrementa la conexión y la alineación de cada paso con los anteriores.
  • Al llegar al último paso, permite por unos segundos que se completen la integración y la alineación.

Desarrollo de la autoestima

Este es un ejercicio sencillo y tremendamente útil y efectivo. Te va a hacer sentir bien, practícalo tantas veces como desees.

  • Haz una imagen mental de ti mismo/a. Piensa en cómo te ves, ¿cómo es la imagen?, fuerte o débil, pequeña o grande, con o sin movimiento, brillante u oscura. En resumen, es positiva o negativa.
  • Elimina lo negativo. Por ejemplo: si ves una imagen que no logra metas, cámbiala. Si tu imagen física no es la que deseas, ajústala… La imagen debe representar tus puntos fuertes, tus mejores habilidades, que te veas como cuando has logrado una meta que habías deseado mucho.
  • Hazle cambios a la imagen que sean muy atractivos y motivadores para ti, por ejemplo: hazla grande, brillante, en colores, en tres dimensiones, con movimiento. Agrega todo aquello que la haga más atractiva y que estimule a actuar. Puedes probar e ir haciendo ajustes, hasta que te sientas bien, satisfecho/a, con cambios en los siguientes parámetros: Visual (color o blanco y negro, brillo, contraste, foco, plano o dimensiones, detalles, tamaño, distancia, ubicación, movimiento) Auditivo (de dónde viene el sonido, tono, volúmen, melodía, ritmo, duración), y kinestésico (tipos de sensaciones como calor o frío, intensidad, lugar, ¿la sensación tiene movimiento?, contínua o intermitente, lenta o rápida).
  • ¿Cómo te sientes con la nueva imagen?. La mayoría de las personas que se toman el tiempo para hacer este sencillo ejercicio, descubren que su sensación de autoestima mejora notablemente. Se ha encontrado que cuando las imágenes que una persona tiene de sí misma, son positivas e intensas, sienten una gran autoestima.

Ejercicio de auto-motivación

Este es un ejercicio sencillo y tremendamente útil. Para hacerlo realmente efectivo, lee varias veces el texto antes de realizar el ejercicio, para que te familiarices con el contenido, la secuencia y los términos.

Búscate a alguien de confianza para que te lo lea y te guíe, o grábalo.

Asegúrate de que no habrá distracciones ni interrupciones. Adopta una posición lo más cómoda posible (acostado o reclinado). No debes tener nada en las manos, y es mejor que no cruces piernas ni brazos.

Cierra los ojos y respira con suavidad.

Lee el texto tal cual está escrito. No introduzcas cambios ni modificaciones, no agregues cosas. Deja pausas, para que puedas responder a la guía.

primera parte

  • Piensa en una tarea o una actividad que sea realmente atractiva, motivante para ti cuando la haces. Imagina que estás viendo la película de esa actividad. Nota las cualidades de la imagen al pensar en esa tarea: la escena, la iluminación, el sonido, los movimientos. Observa una imagen rica, con muchos detalles… OK, apaga el proyector.
  • Descansa y mira a tu alrededor, respira tranquilo.
  • Ahora piensa en algo que no te despierta ningún interés, nota lo que se siente al pensar en algo que te es totalmente indiferente. De nuevo mira la imagen y sus cualidades… OK, apaga la imagen.
  • Descansa y mira a tu alrededor, respira tranquilo.
  • Haz una comparación entre las dos “películas”, y nota las diferencias que encontraste en las cualidades de las imágenes: iluminación, brillo, colores, tamaño, distancia, ubicación, sonidos, sensaciones, etc.
  • Escribe tu propia lista para que tengas los elementos que tu mente (cerebro) utiliza para indicarte que algo es valioso y te motiva. Estas serán tus claves de motivación.

Toma ahora una imagen cualquiera de una experiencia agradable, placentera que hayas tenido. Vas a hacer el siguiente juego con esa imagen: cambia las características visuales, es decir, aumenta o disminuye: colores o blanco y negro, iluminación, brillo contraste, foco (nitidez), detalle, tamaño, distancia, si la imagen tiene borde o no, ubicación (arriba, abajo al frente…), se mueve o está quieta, proporción. Quédate con aquellos cambios que te parezcan más atractivos, más agradables, más motivantes.

Haz lo mismo con las características auditivas: de donde viene el sonido, tono, volúmen, melodía, ritmo, duración.

Y ahora con las características kinestésicas (sensaciones, sentimientos): calidad de la sensación, intensidad, ubiación, velocidad, duración.


Quédate con la combinación de características que te resulte más atractiva y motivante (anótalas), las vas a usar después.

segunda parte

  • Piensa en algo que tú sabes que para ti es valioso hacerlo, pero que te resulta difícil o cuesta arriba.
  • Concéntrate y pregunta a todas tus partes internas si existe alguna objeción a cumplir con esa tarea. Sé sensible a esas objeciones, si las hay. Si no puedes satisfacer la objeción con comodidad, ajusta o cambia la tarea de manera que no existan objeciones.
  • Piensa en las consecuencias de hacer la tarea, no en el trabajo de hacerla. Piensa en los beneficios que obtendrás una vez completada, piensa en tu ganancia.
  • Ahora usa la lista de elementos que encontraste en el ejercicio anterior, los que anotaste. Recuerda que son los más atractivos y motivantes. Úsalos para cambiar lo que piensas acerca de tener esa tarea hecha, completada. Ponle a la tarea completada los elementos visuales, auditivos y kinestésicos que anotaste. Continúa haciendo esto, hasta que te sientas fuertemente atraído, motivado a realizar la tarea.

tercera parte

  • Toma una posición cómoda. Dirige tu mirada hacia la derecha, algo hacia arriba. Imagina que ves a una persona igual a ti, a corta distancia. Este “otro tu” hará el ejercicio, mientras tú lo observas. Solamente cuando estés completamente satisfecho con el proceso, será que las habilidades estarán integradas dentro de ti. Para asegurarte de que así será, quizá te gustaría imaginar que estás dentro de una burbuja de plexiglás, para que realmente estés separado de las actividades que va a hacer tu otro yo.
  • Escoge algo que tu deseas que realmente te motive a hacerlo. Para este ejercicio, escoge algo muy simple, como limpiar tu casa. Algo que no disfrutes haciendo, pero que deseas mucho esté completado, debido a los beneficios que obtendrás como resultado de hacerlo.
  • Observa a tu otro yo y mira lo que se verá cuando la tarea haya terminado, incluyendo las consecuencias positivas, los beneficios directos e inmediatos y los futuros.
  • Ahora mira a ese “otro tú” haciendo la tarea con facilidad. Mientas el otro tú la hace, mantente mirando la imagen de la tarea terminada, y siente bien tu respuesta a verla totalmente completada. Nota cómo la voz interna del otro tú es estimulante y te recuerda las recompensas futuras, y lo que hasta el momento has logrado con respecto al objetivo. Finalmente, ve a tu otro tú encantado de haber terminado y disfrutando de la recompensa obtenida por una tarea que ya se completó.
  • Si lo que ves no te satisface por completo, deja que una suave neblina cubra por un momento la imagen, mientras tu inconsciente hace los ajustes que sean apropiados. En unos segundos, cuando la neblina se quite, verás los ajustes que serán satisfactorios para ti (pausa…).
  • Ahora que tienes la completa satisfacción, permite que la burbuja de plexiglás desaparezca. Toma la imagen del otro tú que tiene todos esos aprendizajes, y deslízala hacia ti. Puedes, si te resulta cómodo, extender tus brazos, tomar la imagen, traerla hacia ti e integrarla contigo. Algunas personas sienten un estremecimiento o una liberación de energía al hacer esto.
  • Finalmente, tómate un momento adicional para que pienses cuándo será la próxima vez en la que tendrás que realizar la tarea para la cual acabas de auto-motivarte.


botones automáticos

Esta es una de las herramientas clásicas de P.N.L. Su gama de aplicación es amplia: ha sido utilizada para tratar una amplia variedad de conductas no deseadas. Típicamente, los botones automátcos han sido aplicados con buen porcentaje de éxitos para el control de hábitos (fumar, beber, comer en exceso…).

En cuanto al manejo de emociones, esta herramienta será muy útil en situaciones del tipo “ante determinado estímulo o contexto, tengo una conducta que no quisiera tener”. Por ejemplo: “cuando me contradicen en público, me da rabia”.

  • Nota: lo que el botón trabaja es únicamente el cambio de conducta. Para quien desea, por ejemplo, perder peso, el botón modifica la conducta de comer en exceso, pero no la imagen física de gordo a delgado.

He aquí una versión sencilla:

  • Escoge la conducta que deseas cambiar. Recuerda, la conducta.
  • Imagina que ya superaste la situación. Escoge la conducta que tendrás una vez superada la situación.
  • Imagina que desde aquí, donde estás sentado, ves proyectada en la pared una imagen tuya con la conducta que hasta hoy habías tenido (la que no deseas más). Asegúrate de que la imagen sea pequeña (digamos del tamaño de un cuaderno) y que tiene algún marco alrededor. Esta es la IMAGEN 1. Ahora pon la pantalla en blanco.
  • Ahora crea una imagen de lo que será tu conducta en el futuro, a partir de hoy. Esta imagen es brillante, iluminada. Date cuenta de las sensaciones que te produce ver esta imagen. Asegúrate de que te genera sensaciones agradables, positivas. Esta es la IMAGEN 2. Pon la pantalla en blanco.
  • Mientras permaneces en tu puesto, vuelve a proyectar en la pantalla la imagen de la conducta que vas a cambiar, y en una de las esquinas inferiores (la que prefieras), coloca un cuadrito pequeño, como de dos o tres centímetros, con la imagen que creaste de lo que será tu conducta futura. Esta imagen pequeñita, estará oscura.
  • Muy bien, ahora, harás lo siguiente: simultaneamente vas a oscurecer y hacer pequeña la IMAGEN 1, y agrandas y vuelves brillante la IMAGEN 2. Muy bien, ahora pon la pantalla en blanco.
  • Ahora que ya lo sabes hacer, lo vas a hacer muy rápido seis veces: 1 pantalla en blanco, 2 pantalla en blanco, 3 pantalla en blanco, 4 pantalla en blanco, 5 pantalla en blanco, 6 pantalla en blanco.
  • Chequeo: piensa en la primera imagen, ¿qué pasa?. La respuesta típica es que resulta muy difícil o imposible formarse la primera imagen ó que la imagen es difusa y oscura, en el caso de que la formes, notarás que no hay sensación de desagrado, sino neutra.
    • Nota: Este ejercicio lo puedes hacer tu mismo/a, le pides a alguien que te vaya leyendo los pasos, o puedes grabarlo.

Referencias bibliográficas:
    • Introducción a la P.N.L ”, Joseph O´Connor y John Seymour, Urano Ediciones
    • Cómo cambiar creencias con la P.N.L.”, Robert Dilts, Sirio Editorial
    • Manual del Cerebro para usuarios”, Bob G. Bodenhamer y L. Michael Hall, Palmyra Editorial
    • P.N.L. La Magia en acción”, Richard Bandler, Sirio Editorial
    • Autoestima y desarrollo personal con P.N.L.”, Salvador A. Carrión López, Obelisco Ediciones